CUANDO LOS NIÑOS RONCAN
Esos ruiditos que muchas veces son molestosos y, en ocasiones, asustan a las mamás son ronquidos. Cuando son persistentes y continuos es momento de acudir a un especialista, pues podrÃa tratarse de un SÃndrome de Apnea Obstructiva del Sueño (SAOS). Al respecto, consultamos con el otorrinolaringólogo,. Dr. Oscar Gómez Hermosilla.
El ronquido es un sÃntoma de una afección conocida como SÃndrome de Apnea Obstructiva del Sueño (SAOS). Se caracteriza por el sonido que se genera al rozar entre sà las paredes de la faringe. Su presencia no implica necesariamente que el niño tenga un problema significativo; pero si la intensidad alta, pordÃa tratarse de la presencia de este sÃndrome.
El SÃndrome de Apnea Obstructiva del Sueño (SAOS) se manifiesta cuando el niño hace un gran esfuerzo para mantener el flujo respiratorio, impidiéndole que se mantenga en sueño profundo (sueño REM) o cuando suele tener movimientos oculares rápidos, sueños y un patrón respiratorio mÃnimo.
La causa más frecuente del ronquido y la apnea en niños es la hiperplasia adenoamigdalina (aumento de volumen exagerado de las amÃgdalas) y la rinitis alérgica no tratada correctamente. Además, otros factores menos comunes son: la obesidad, las malformaciones cráneo-faciales y las parálisis cerebrales.
El objetivo fundamental al evaluar a un niño que ronca es determinar si hay una obstrucción respiratoria alta crónica durante el sueño y que ésta pueda afectar su salud. Esta condición se asocia a problemas de aprendizaje como el déficit de atención, hiperactividad, agresividad, disminución del crecimiento y, en casos extremos, Cos Pulmonale (enfermedad cardÃaca en la que se produce una alteración en la función y en la estructura del ventrÃculo del corazón como consecuencia de un aumento de la presión en la circulación pulmonar o hipertensión pulmonar), y la muerte.
Cuando los padres identifican que el niño ronca deben recurrir al especialista para identificar el tipo de ronquido de éste. A veces, en los casos leves, es difÃcil describir y determinar la presencia de una obstrucción respiratoria alta, presencia de sueño alterado, dificultad para respirar dormido; y en los casos más graves, el ronquido y los signos de distres respiratorio mencionados anteriormente. Además de los sÃntomas ya mencionados, se puede presentar la apnea obstructiva del sueño, que es la gravedad.
En el examen fÃsico, se observan algunos aspectos muy relevantes:
- Hiperplasia o Hipertrofia adenoamigdalina, cuando las amÃgdalas son enormes.
- Mala oclusión dental por la obstrucción nasal crónica, a consecuencia de esto el niño respira por la boca.
- En la nariz la mucosa nasal por efecto de la rinitis alérgica: Suele empeorar por las noches y puede ocasionar una obstrucción en la respiración durante el sueño. La mucosa nasal demuestra palidez, rinorrea serosa o hialina (secreción nasal que puede ser mucosa, serosa o purulenta) y congestión.
Igualmente, en el examen fÃsico es necesario descartar otras causas de obstrucción respiratoria como las desviaciones septales, pólipos y tumores nasales o farÃngeos.
Cuando el médico necesita más detalles acerca del caso que presenta el niño se recurren a estudios complementarios como:
- RadiografÃa de perfil de cavum farÃngeo:  Determina el tamaño del adenoides. Si la radiografÃa muestra una obstrucción total, el niño debe tener una respiración oral permanente y se recomienda una intervención quirúrgica.
- Nasofibroscopia:Permite la evaluación completa de las fosas nasales, la faringe y la luz de la laringe. Este estudio revela información más detallada a la de la radiografÃa de cavum.
- Video durante el sueño:Es una manera práctica y económica de extender el examen fÃsico hasta la cama del paciente.
- PolisonografÃa (PSG):Es el gol estándar para determinar la presencia del SAOS. Se realiza durante el sueño, monitorizando variables cardiorrespiratorias y neurológicas. Es útil para ciertos grupos de pacientes con parálisis cerebral o con malformaciones cráneo-faciales con evidente SAOS. En estos pacientes se recomienda la traqueotomÃa como tratamiento posible.
- TomografÃa (TC) y resonancia magnética (RM): Se indican para evaluar lesiones ocupantes de espacios y malformaciones cráneo-faciales.
- Ecocardiograma:Se utiliza para descartar la presencia de hipertensión pulmonar cuando se sospecha que el SAOS es grave y prolongado.
El tratamiento de elección, en la mayorÃa de los casos, es la adenoamigdalectomÃa. Es un procedimiento quirúrgico que consiste en extirpar las amÃgdalas. El antecedente de asma puede reforzar la indicación, ya que es lógico que el SAOS pueda agravar la obstrucción que ya genera el asma.
Cabe mencionar la importancia de que los padres tengan en cuenta los sÃntomas mencionados, ya que existe una gran cantidad de niños con estos sÃntomas. Algunos niños lo tienen por un perÃodo largo de tiempo, por lo que se recomienda recurrir a los especialistas en la brevedad posible. En la mayorÃa de los casos, estos problemas pueden ser solucionados con una simple adenoamigdalectomÃa o con tratamiento médico, que redundará en la calidad de vida del niño.
Dr. Oscar Gómez Hermosilla
OtorrinolaringologÃa / Reg. Nº 3151
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